La Fundación comenzó trabajando con chicos más grandes y con problemas de adicciones. A partir de 2003 se refaccionó el hogar y se convirtió en un sitio de prevención y contención de los chicos que pasan tiempo en las calles. Se realizan talleres y apoyo escolar. La ayuda que reciben es mínima de parte del municipio y el gobierno provincial. También la gente de Roca que conoce la fundación aporta lo que los chicos necesitan “esto es como una casa con 30 chicos, necesitamos todo, desde cepillos de dientes y jabones, hasta lápiz y cuadernos” señaló Martiangeli.
En Ninquihue los chicos desayunan, se bañan, almuerzan, hacen la tarea, van a la escuela, cenan y se vuelven a sus casas. “Hacemos todo lo que se hace por un hijo. Hacemos todo lo que un chico tiene que hacer en su casa: higiene, comida, herramientas para educarse, talleres y cambios de habito” añadió Martiangeli.
Los chicos llegan por conocidos o por gente que sabe de la fundación y los lleva. No tiene la obligación de quedarse pero los diferentes operadores del lugar hacen lo posible para darles las herramientas y el espacio para integrarlos y ayudarlos. Un espacio que cumple funciones de un Estado ausente con los más necesitados es la Fundación Ninquihue. A pesar de los problemas y la poca ayuda que reciben, hoy 30 chicos olvidados tienen su espacio.
La Fundación Ninquihue funciona en el barrio Aeroclub, en la calle Libertad al 2100. Atienden de Lunes a viernes de 8 a 20 hs. Se puede visitar a cualquier hora o comunicarse con el teléfono 424192.